Un 40% de los pacientes con COVID-19 del Hospital General Universitario de Alicante que han superado la enfermedad presentan síntomas persistentes transcurridas ocho semanas del alta. Se trata de sintomatología de resolución más lenta que en otras infecciones, pero mayoritariamente de carácter leve y en regresión progresiva.
Este es el principal resultado extraído tras el análisis de datos de las consultas de seguimiento que puso en marcha el Equipo COVID durante los meses de junio y julio. Un novedoso dispositivo asistencial de seguimiento a pacientes que han superado la COVID-19, con el objetivo de estudiar y detectar de forma precoz la sintomatología y las posibles secuelas de la enfermedad, así como minimizar su impacto.
En esta prestación multidisciplinar han colaborado el Servicio de Neumología, la Unidad de Enfermedades Infecciosas (UEI) y el Servicio de Medicina Interna.
Las dos consultas se habilitaron en el hospital de campaña de Alicante y en ellas se llevó a cabo una revisión a 320 pacientes, con una edad media de 67 años, de los cuales un 80% habían estado ingresados en el Hospital de Alicante y el restante 20% son afectados que habían cursado la enfermedad de forma leve, en seguimiento por parte de la Unidad de Hospitalización a Domicilio (UHD).
Las consultas de revisión comprendían un cuestionario de calidad de vida y una serie de pruebas clínicas: una exploración física, una analítica, una entrevista clínica, una radiografía de tórax y una espirometría para evaluar la función respiratoria.
“Este dispositivo ha ofrecido un servicio centralizado y estructurado a los pacientes que han superado la infección, evitando su dispersión en diferentes niveles asistenciales, para realizarles una valoración global. Se les citó a medio plazo, transcurridas, aproximadamente, ocho semanas del alta, de manera que los síntomas más inmediatos hubieran remitido y así poder analizar cuáles se mantienen en el tiempo”, ha apuntado el neumólogo Joan Gil.
Por su parte, la responsable de la UEI, la doctora Esperanza Merino, ha subrayado que desde el Equipo Covid se consideró “fundamental” ofrecer este seguimiento a los pacientes, “dado que hay evidencia científica de las secuelas provocadas por otros coronavirus, por ejemplo, a nivel pulmonar. Por ello, al tratarse de una enfermedad que todavía es bastante desconocida, decidimos estudiar la evolución de los síntomas, con el fin de poder extraer conclusiones y ofrecer el mejor tratamiento de manera temprana a estos pacientes”.
Atendiendo a los resultados, ambos profesionales se han mostrado optimistas, ya que una vez realizado este seguimiento, el 60% de los pacientes se encontraban asintomáticos y han recibido el alta. Y en los pacientes en los que persisten los síntomas, éstos son leves en la mayoría de los casos. Así, se ha identificado a un 40% de pacientes con algún síntoma persistente, siendo los más frecuentes el cansancio y dolor muscular, en un 20% de ellos; tos y dificultad respiratoria con el esfuerzo en un 15% de pacientes; cefalea entre el 10% y 15% y pérdida de olfato en un 15% de los casos, la cual se va recuperando en una amplia proporción de pacientes.
Estos pacientes se han derivado a consultas específicas que se han habilitado en diferentes especialidades, como es el caso de Neurología, Medicina Interna, Neumología y Oftalmología, dado que en un principio algunos pacientes referían pérdida de la agudeza visual.
“Más adelante se darán a conocer estos resultados, pero dada la levedad de la sintomatología, las impresiones son buenas y se espera la resolución de la mayor parte de los síntomas. Por ejemplo, aunque el estudio de las secuelas respiratorias requiere algo más de tiempo, más de un 90% de los pacientes presentan en las radiografías una buena evolución y una función pulmonar normal”, han remarcado las mismas fuentes.
