Un periodo de vacaciones inusual. La Policía Local de San Vicente del Raspeig ha intensificado durante estos días de Semana Santa los controles rutinarios para evitar que la ciudadanía se desplace innecesariamente hacia otros puntos, ya que no está permitido dado el actual estado de alarma.
San Vicente y la ciudadanía sanvicentera está viviendo una Semana Santa inusual generada por la actual crisis sanitaria. “Sabemos que después de un mes es cada vez más complicado, pero debemos de continuar con el confinamiento y permanecer en casa”, subraya la Policía Local de San Vicente.
Durante los últimos días, los agentes han intensificado los controles rutinarias. Este miércoles y jueves, días en los que se suele producir la operación salida, la Policía Local de San Vicente ha identificado a 235 personas y 377 vehículos, de los cuáles se han interpuesto 44 denuncias por incumplimiento del estado de alarma.
“Tal y como reflejan los datos, en estos días han aumentado los desplazamientos innecesarios. El motivo de ello se encuentra relacionado con el periodo actual de Semana Santa”, explica la Policía Local. “Recordamos que no están permitidos los desplazamientos a segundas residencias”, añaden.
Residuos urbanos
Servicios Urbanos ha intensificado las labores de limpieza y desinfección desde que comenzó el estado de alarma para frenar la expansión del Covid-19. Un trabajo al que la ciudadanía debe de contribuir con sus acciones para mantener las vías, mobiliario urbano y contenedores lo más limpio posible.
La Policía Local también ha intensificado el control sobre el vertido de residuos a los contenedores. “Ahora más que nunca es necesario respetar los horarios para tirar la basura a los contenedores urbanos. Una práctica que para algunos vecinos y vecinas no la están llevando a cabo. Por ello, recordamos que hay que depositar los residuos en horario de 20.00 a 23.00 horas, en bolsas cerradas y dentro de los contenedores”, afirman. También subrayan que “no está permitido tirar poda y enseres porque las islas de los contenedores deben estar lo más limpias posibles para evitar focos de infección”.
No llevar a cabo estas prácticas correctamente puede acarrear multas de entre 200 y 500 euros según se encuentra tipificado en la ordenanza municipal de protección de la imagen de la ciudad.