Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) está aplicando el sistema de desinfección mediante nebulización volumétrica con peróxido de hidrógeno en el interior de los trenes y tranvías que circulan en el TRAM d’Alacant, con la finalidad de hacer frente a los efectos de la pandemia de la COVID 19.
Este sistema de nebulización, que ya se aplica en el interior de las unidades de Metrovalencia, es el único procedimiento de estas características que cuenta con la certificación del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas), ya que las pruebas realizadas hasta la fecha certifican la anulación total de la capacidad infectiva del virus SARS-CoV-2 en aquellos espacios en los que se actúa.
Los trabajos se realizan por las noches en los talleres de El Campello tras la finalización del servicio. La nebulización también se realiza para las unidades que prestan servicio en Valencia en los talleres de València Sud, Machado y Tarongers.
La nebulización se suma a los trabajos que diariamente se realizan por parte de FGV de limpieza y desinfección en el interior de trenes y tranvías, así como en dependencias propias y estaciones de Valencia y Alicante, con la finalidad de garantizar la prestación de un servicio de transporte con las mayores garantías de seguridad, y siguiendo en todo momento las indicaciones de las autoridades estatales y autonómicas.
Esta técnica innovadora utiliza desinfectantes líquidos con una base de peróxido, que se transforma en micropartículas que se suspenden en el aire, alcanzando la totalidad de zonas, superficies y volúmenes del espacio a desinfectar.
Adicionalmente, este sistema permite, activando los sistemas de ventilación de las unidades, que el producto entre dentro de los circuitos de aire, no accesibles manualmente. De esta forma se aplica su efecto virucida a las superficies y zonas de esos circuitos, ya que pueden ser un foco de estacionamiento y distribución, a lo largo de las unidades, de partículas transmisoras de la infección.
El presupuesto conjunto de estos trabajos adjudicados por FGV por procedimiento de emergencia asciende a 1.553.640 euros, IVA incluido, por un periodo inicial de seis meses.
La aplicación de este sistema de desinfección se realiza por parte de la UTE formada por las empresas Vareser 96, SL y Levantina de Ingeniería y Construcción SL. Estas empresas han sido las que han desarrollado el sistema propuesto, junto con la colaboración de diferentes departamentos de la Universidad Politécnica de Valencia y el Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA) del CSIC.
Cómo se aplica
El personal técnico de desinfección van introduciendo en cada una de las unidades el equipo nebulizador. El mismo está previamente programado con los tiempos de aplicación, en función de los volúmenes a desinfectar de cada unidad.
El equipo de aplicación está formado por grupos de dos a tres personas por taller (según taller y unidades a tratar) y de un equipo de nebulización volumétrica S-FOG de Aplicaciones Técnicas Sanosil SL, con tecnología de aplicación de 360 grados que cubre el 100% del ambiente y superficie con una eficacia en la eliminación de patógenos del 99,99%.
Con los estudios realizados en los talleres de FGV, se han comprobado los tiempos necesarios para la correcta aplicación del sistema que varían según el tamaño de las unidades.
Según el tipo de unidad, se realiza la nebulización desde un único punto o desde ambos extremos, para garantizar el máximo alcance. La nebulización se aplica con las puertas cerradas.
Posteriormente, un o una profesional técnico de desinfección, dotado de un traje y mascaras filtro específicas, se introduce a recuperar el equipo de desinfección para su traslado al siguiente punto de tratamiento, dejando las puertas cerradas para que el agente desinfectante continué actuando.
Todos los operarios y operarias que participan en estas operaciones van dotados de EPI adecuados a su función y de sensor personal de seguridad.
Una vez finalizado el periodo de actuación se procede a la apertura de las puertas para la ventilación de las unidades. Se realiza el control de las concentraciones previamente a la vuelta al servicio de las unidades.