El Partido Popular advierte de que los presupuestos de Jesús Villar y su equipo de Gobierno no incluyen una partida suficiente para resolver uno de los principales problemas que tiene la ciudad.
El Partido Popular (PP) ha vuelto a poner en evidencia que el tripartito de San Vicente del Raspeig no es capaz de aprobar el nuevo contrato de limpieza viaria y recogida de residuos. El servicio lleva caducado desde mediados de 2020 y, a la vista de los presupuestos presentados para el próximo año por Jesús Villar y su equipo de gobierno, el Ayuntamiento no lo pondrá en servicio tampoco en 2023.
El candidato del Partido Popular a la Alcaldía, Pachi Pascual, ha afirmado que “es muy preocupante que en las fechas en que nos encontramos todavía no estén redactados los pliegos de condiciones para volver a sacar a licitación el nuevo contrato, algo imprescindible para poder renovar la maquinaria y dar los medios necesarios a los trabajadores para que puedan mantener en condiciones de limpieza el municipio”.
Pachi Pascual ha indicado que “además, el tripartito no ha incluido un aumento del coste del servicio en las partidas presupuestarias de 2023, por lo que es evidente que el nuevo contrato no entrará en funcionamiento el próximo año y los vecinos tendrán que seguir sufriendo las consecuencias de un contrato obsoleto que debería estar renovado desde hace años”.
En esta línea, el portavoz del grupo municipal del PP, Óscar Lillo, ha añadido que “los presupuestos de 2023 reflejan que, no contentos con las carencias actuales, Villar reduce aún más la partida destinada al servicio de recogida de basura y limpieza viaria, y pretende que creamos que con 700.000 euros menos que en el ejercicio actual, la limpieza va a mejorar”.
“Todos conocemos el estado de dejadez y suciedad en el que se encuentran las calles de nuestra localidad, y el equipo de gobierno no está haciendo nada al respecto”, ha afirmado Lillo, para quien “es una auténtica dejación de funciones por parte de Jesús Villar como máximo responsable de los servicios que presta nuestro Ayuntamiento”.
En el pleno de marzo, los trabajadores de la empresa concesionaria de este servicio se concentraron a las puertas del Consistorio, accediendo hasta el propio salón de plenos, para advertir de las condiciones del actual contrato y mostrar su preocupación por el futuro. El alcalde les prometió entonces soluciones por temor a la amenaza de una huelga en plenas Fiestas Patronales y de Moros y Cristianos, pero pasa el tiempo y éstas no llegan.
El Partido Popular ha recordado que el contrato de basura en San Vicente caducó a mediados del año 2020, fecha a la que se anticipó la empresa concesionaria al notificar su voluntad de no seguir prestando el servicio a su vencimiento. Desde su caducidad, se está recurriendo a prórrogas forzosas en contra de la voluntad de la empresa y con informes técnicos municipales negativos, algo ya habitual para este equipo de gobierno.