El Plan de Podas 2022-2023, que arrancó el pasado mes de noviembre con las tipuanas de Doctor Fleming, pone el acento en la conveniencia de disponer de árboles maduros y bien desarrollados, evitando las tareas de poda que reduzcan al mínimo su tamaño. “Sólo con ejemplares de copa grande puede conseguirse que la masa arbórea cumpla con sus objetivos, por un lado contra la contaminación atmosférica y acústica, y por otro, de sombraje y embellecimiento de la ciudad”.
Para el departamento de Parques y Jardines es importante cambiar la concepción que parte de la ciudadanía mantiene sobre el arbolado de la ciudad en general y las podas en particular. El verde urbano solo se percibe en ocasiones como una fuente de inconvenientes (suciedad por caída de hojas, flores y frutos, interferencias de ramas con fachadas, alumbrado, tendidos eléctricos, alergias, aparición de insectos, etc). “La percepción generalizada es que el arbolado y la vegetación urbana cumple, casi exclusivamente, una función ornamental o de embellecimiento de la ciudad; pero, sin desdeñar la clara función ornamental, la vegetación en la ciudad es un valioso recurso que alivia los efectos adversos de la urbanización, tanto desde el punto de vista ambiental como del socioeconómico, convirtiendo la ciudad en más amable y habitable”, indica el documento.
Bajo esa premisa de mantener una buena masa arbórea, las tareas de poda se realizan por alguno de los siguientes motivos, o por combinación de los mismos: por cuestiones de seguridad cuando se aprecia posibilidad de rotura y caída de ramas o árboles enteros; podas de ramas muertas, enfermas, mal dirigidas, cruzadas o demasiado juntas que afectan estado fisiológico y estético del árbol; podas de ejemplares jóvenes para darles forma; por interferencia grave con edificios u otras infraestructuras (líneas eléctricas, telefónicas, etc.).
De acuerdo a la previsión municipal, los operarios terminarán 2022 y comenzarán el nuevo año en los colegios públicos de la ciudad. El concejal de Parques y Jardines, Alberto Beviá, de Esquerra Unida, ha explicado que la poda del arbolado urbano se adapta en tiempo y forma a cada especie y a las circunstancias concretas de cada plantación. Y ha destacado la importancia de que se respeten los avisos y señales verticales de prohibido aparcar que se colocan en las calles antes de las actuaciones. “Los vehículos aparcados impiden que los operarios puedan trabajar y esta situación va originando retrasos en el plan de actuación y dificulta la planificación municipal”.
Consulta en la web
En la sección de Parques y Jardines de la web municipal www.raspeig.org puede consultarse el plan de podas por calles. O directamente en el enlace: https://acortar.link/1qQDU8