La sensación generalizada es que la pandemia ha destruido parte del tejido productivo de San Vicente. Sin embargo, los datos oficiales de la Conselleria de Economía Sostenible demuestran lo contrario. Según la estadística de empresas inscritas en la Seguridad Social, el municipio registró durante el primer trimestre de este 2021 casi un 4 por ciento más de actividades que durante ese mismo periodo de 2020.
Efectivamente, el primer trimestre de 2020 (la pandemia comenzó a mitad de marzo de ese año), se cerró con un total de 1.382 empresas inscritas en la Seguridad Social. La mayor parte de ellas, 1.181, estaban encuadradas en el sector de servicios. 161 pertenecían a la construcción, 133 a la industria y 7 a la agricultura. En este primer trimestre de 2021, el número de empresas cotizantes creció un 3,91% en relación a los tres primeros meses del año pasado hasta situarse en 1.436. Por sectores de actividad, han aumentado los servicios (3,15%), la construcción (9,94%) y la industria (3,1%), mientras que la agricultura se mantuvo invariable.
La tendencia parece al alza. El primer trimestre de cada año suele ser de ajustes y cierres de empresas. Sin embargo, la relación es también positiva en San Vicente del Raspeig en la comparación entre los últimos tres meses del año pasado (1.434 empresas) con los tres primeros de este 2021 (1436). Así pues, la actividad en el arranque del año se ha mantenido, una tendencia que la Concejalía de Comercio e Industria valora con optimismo.
“Las cifras las observamos con mucha prudencia”, advierte el concejal Alberto Beviá, de Esquerra Unida. “Si bien es cierto que tanto el número de empresas de San Vicente inscritas en la Seguridad Social como los datos del empleo en nuestro municipio muestran una tendencia al alza en estos primeros meses del año, la situación no es buena. Tenemos mucho desempleo, sobre todo en mujeres, y muchísimo trabajo que hacer para contribuir con medidas eficaces, inversión y ayudas directas a consolidar primero y a mejorar después esos datos positivos”.
Pese a la tendencia positiva, la Concejalía entiende que hay tener en cuenta de dónde partimos. Porque la estadística también refleja datos negativos si éstos se analizan a más largo plazo, cuando se produjo una reducción próxima al 5% en la comparativa entre el cuarto trimestre de 2019 y el mismo periodo de 2020, una merma que afectó a los sectores de los servicios y la construcción. La industria y la agricultura se mantuvieron entonces invariables.