El Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig ha aceptado un requerimiento de la Inspección de Trabajo que detectó un desfase entre el dinero recibido por 11 personas contratadas con cargo a subvención en el programa EMCUJU 2019-2020 (incentivos a la contratación de personas jóvenes por entidades locales en el marco del Sistema Nacional de Garantía Juvenil) y el salario que les correspondía por su cualificación profesional.
Según ha informado el concejal de Empleo y Desarrollo Local, Alberto Beviá, de Esquerra Unida, el Ayuntamiento ha aceptado el requerimiento de la Inspección y se procederá al pago de las cuotas de Seguridad Social y diferencias salariales atrasadas a las 11 personas que fueron contratadas con cargo a dicho programa de fomento de empleo.
El programa EMCUJU 2019-2020, que contrata a jóvenes en la modalidad de prácticas, finalizó el pasado 31 de octubre de 2020. Beviá, que también ostenta la delegación de Hacienda, ha informado de que el Ayuntamiento hará frente al reconocimiento de la deuda, que asciende a un total de 119.000 euros, con cargo al capítulo 1 del Presupuesto Municipal.
Hasta ahora, el Ayuntamiento ajustaba el salario de las personas contratadas a la subvención recibida, aplicando así el convenio colectivo municipal vigente aprobado en el mes de diciembre de 2014. A partir de ahora, los programas que no estén subvencionados al 100% en los que hubiera una diferencia salarial y que supongan un gasto plurianual para las arcas municipales, se someterán al Pleno, para que sea este órgano municipal el que adopte la decisión de llevar a cabo o no este tipo de contratos subvencionados que necesiten aportación municipal.