Ante los recientes comunicados de prensa de los partidos de la oposición, en relación a la nueva Tasa de basuras que el Ayuntamiento se verá obligado a implementar para 2025 en virtud de lo dispuesto en la “Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular” (Art. 11.3), desde VOX, manifestamos lo siguiente:
La citada ley 7/2022, establece la obligación para los municipios de que la llamada Tasa de basuras deba ser no deficitaria, teniendo que sufragar con ella, en su integridad, los costes de recogida y tratamiento de residuos urbanos. Esta obligación, tal como se dice con claridad en la exposición de motivos de la citada ley, “se incluye expresamente, por primera vez”.
La Tasa de basuras actual de San Vicente del Raspeig, tan solo cubre alrededor del 45% de los citados costes, `por lo que, por imperativo de la propia Ley, se debe reconfigurar la tasa de manera que financie la totalidad del coste. Es decir, se impone un incremento de prácticamente el doble.
La Ley 7/2022, de 8 de abril, fue aprobada en el Congreso de los Diputados por una mayoría de votos compuesta por PSOE, Unidas Podemos, PNV, Bildu y Compromís, entre otros, y, como no podía ser de otra manera, contó con el voto negativo de VOX.
Ahora, estos mismos partidos que aprobaron la Ley que obliga la subida de la Tasa de basuras, de forma hipócrita y con el único fin de confundir y engañar al ciudadano, aparentan mostrarse contrarios a los efectos de la norma que ellos mismos aprobaron en 2022.
La postura del PSOE de echar balones fuera, aludiendo a “Europa”, llama la atención pero es comprensible dado que, desde hace algunos años, no deja de ser cierto que las políticas llevadas a cabo por los dos grandes grupos políticos europeos, entre los que se encuadra el grupo socialista español, van encaminadas a la implantación generalizada de los denominados impuestos verdes. También habría que recordar al PSOE que los últimos presidentes de la Comisión Europea, Von der Leyen incluida, vienen saliendo elegidos gracias a los votos del grupo socialista europeo.
Sorprende más la reacción de EU-Podem, cuyo miembro, Alberto Beviá, ha sido concejal de Hacienda alrededor de 6 años. Más que sorprende, preocupa, que en todo ese tiempo desconociera que una de las tasas que gestionaba su concejalía, la Tasa de Recogida de Residuos Sólidos Urbanos, no cubría ni la mitad de los costes asociados a la recogida y tratamiento de residuos. También preocupa que, tanto EU-Podem como Compromís, ignoren el contenido y las consecuencias de las leyes que aprueban en el Congreso, lo que denota una enorme irresponsabilidad.
En definitiva, desde VOX comprendemos y compartimos el malestar que esta nueva Tasa de Basuras, promovida por la izquierda, pueda generar entre la ciudadanía y, dentro de las limitadas competencias municipales que tienen los Ayuntamientos en materia impositiva, nos comprometemos a reducir otros impuestos, como así hemos hecho con el IBI, de manera que se amortigüe lo máximo posible y de manera progresiva.
En cuanto al cinismo o ignorancia de que hacen gala los partidos de la oposición, oponiéndose a una medida que ellos mismos han implantado mediante la aprobación de la Ley 7/2022, solo se puede entender desde un propósito de manipular a la opinión pública. Afortunadamente, los sanvicenteros están muy por encima de esas formas de entender la política.