El PP denuncia esta circunstancia que lejos de ser una inocentada, propia de un 28 de diciembre, es toda una realidad. Nada se sabe, según la portavoz PSOE, Asunción París, de los 200 manuales corporativos que se facturaron tras su aprobación a principios de 2020 y debían haber sido repartidos entre los departamentos, asociaciones, etc., que tengan que hacer un correcto uso del mismo. Ésta esprobablemente una las causas que ha podido crear la polémica que existe actualmente sobre su correcta utilización en lo referente a cuándo corresponde poner el emblema o el escudo municipal.
“El Ayuntamiento desde marzo de 2020, aprobó el manual corporativo por Junta de Gobierno, y a preguntas del Partido Popular en el pleno de diciembre, han confirmado que se imprimieron 200 manuales, según indicó la propia concejal, pero no saben dónde están” señala el portavoz Popular, Óscar Lillo “solo tenemos constancia de un borrador editado previo,del que se nos hizo entrega, desconocemos a quién más, sin que figure fecha exacta de aprobación, y hasta hace un par de semanas, y tras las insistentes cuestiones sobre el tema de este grupo municipal en los plenos, ni siquiera aparecía el manual en la web municipal, pese a que Asun París afirmara que estaba desde hace tiempo. No era así, existía el enlace, pero no el acceso al mismo”.
Los Populares consideran que el objetivo del manual corporativo era dar sentido a la creación de un emblema con motivo del 50 aniversario de la aprobación oficial del escudo de San Vicente del Raspeig, pero a día de hoy la realidad es que seguimos sin conocer cual es el uso de ese emblema, algo que está generando polémicas. “No existe una unificación de criterios, y se dan circunstancias tan incoherentes como que una mañana sales y en los vinilos que adornan el belén municipal aparece el emblema, y a la mañana siguiente hay un parche sobrepuesto con el escudo heráldico. Incongruente pero cierto”.
“Hay que poner en valor el uso del escudo, existe un ordenamiento para ello, y lo que no entendemos es que el ayuntamiento se gaste dinero público en la elaboración de 200 manuales, cuyo reparto deberían haber sido los departamentos municipales que tuvieran que hacer uso del mismo, así como asociaciones, etc., que deben saber cuando utilizar uno u otro en cartelería, etc., pero éstos manuales nunca se hayan repartido, es más nadie parece saber dónde se encuentran o qué pasó con ellos, desde que fueron aprobados por Junta de Gobierno a principios de 2020. Por ello solicitamos que se esclarezca el paradero de los mismo, y se les dé el uso para el cual fueron elaborados”.
No es la primera vez que el Partido Popular es conocedor de cuestiones de similares características “el Ayuntamiento compró 500 paraguas para una campaña de comercio y se utilizó una cantidad muy pequeña. A preguntas del Partido Popular en pleno, se nos dijo que se utilizarían en futuras campañas, pero jamás los hemos vuelto a ver, esperamos que al menos estén localizables si volviéramos a preguntar por ellos” continúa el portavoz con los ejemplos, “también tenemos conocimiento de la elaboración y pago hace tiempo de 10.000 cuadernillos recortables, que jamás hemos visto distribuir, o 1.200 botellitas de agua para una San Silvestre virtual. Es pura curiosidad saber cómo han sido repartidas”.
Los Populares van más allá en las curiosas circunstancias que observan cada día en su trabajo de control y fiscalización al equipo de gobierno. “es que ocurren cosas tan llamativas como escenarios que aparecen por “gentilezas” de proveedores hacia un organismo público, puestos de venta ambulante en parques públicos donde no se les ha autorizado sin que nadie se responsabilice de ello, ni se conozca el protocolo a seguir con respecto a su ubicación, o el cuestionable pago de la elaboración del organigrama municipal, que tuvo que paralizarse por un error que no se ajustaba a los trámites de contratación” matiza Lillo.
“Solicitamos transparencia y claridad en todos estos casos, empezando por saber por qué se encargar trabajos con dinero público que luego no se utilizan” y prosigue “y en segundo lugar, que se esclarezca dónde se encuentran los 200 manuales corporativos perdidos y la utilización correcta que se debe hacer del emblema, sin pretender eliminar en ningún momento el uso oficial y establecido por normativa del escudo de San Vicente, que es el que nos representa”. Para concluir Lillo afirma “el Partido Popular continuará realizando una oposición exigente y propositiva. Somos el partido que, pleno tras pleno, lleva a pleno mociones de ámbito local, realizando a su vez una labor de fiscalización, ante cuestiones como éstas que no están claras. Aunque al equipo de gobierno parece que le molesta y se sienta incómodo ante la oposición que realizamos proponiendo, por una parte medidas buenas para San Vicente, sus vecinos y sus comercios, y por otra, exigiendo transparencia y responsabilidades, incluso amparados por el Síndic de Greuges.